domingo, 14 de noviembre de 2010

Noviembre: San Martiño y cake...

Buenas!

Aquí sigo, intentando cumplir mi auto-bondadoso-egocéntrico propósito de almenos-sipuedo-pordiosquemedetiempo escribir una entrada a la semana!!!!!!

E

Siempre me quejo del tiempo, cierto, pero hay una cosa que jamás perdono: el San Martiño! Sí, esta feria caballar en Francos (Calo), a la que realmente vamos a tomar el pulpo. Cogí el día libre, a pesar de acabar en casiña alguna cosa, pero valió la pena: el pulpo, espectacular, de verdad; el barrantes, muy bueno (mi estómago sigue vivo ;D), y no nos empapamos (como los tres últimos años). Así que, gente, esto es vida!!!

Y a por la receta de esta semana: toca dulce! Llevaba tiempo queriendo hacer este cake, que lo vi en el blog de Arantza (sí, le estoy copiando un montón), pero había que esperar a que lloviese e hiciese frío para disfrutarlo...

PASTEL DE ZANAHORIA CON ESPECIAS

Ingredientes

3 tazas de zanahoria rallada fina
1 taza de aceite vegetal (utilicé de girasol)
1 taza y 1/4 de miel
4 huevos a temperatura ambiente
2 tazas y media de harina integral (la próxima vez lo haré con harina normal, la verdad)
2 cucharadas pequeñas de levadura
2 cucharadas pequeñas de bicarbonato
1 cucharada pequeña de sal
1 cucharada pequeña (rasa) de clavo
1 cucharada pequeña, rasa, de nuez moscada
1 cucharada pequeña, rasa, de cardamomo (quité las vainas)
1 cucharada pequeña, rasa, de pimienta de Jamaica (aportación mía, y no era por echar lo que tenía en la despensa)
1 cucharada sopera de canela (le eché la mitad, la canela no es mi fuerte)
2 cucharadas de jengibre fresco rallado (esto sí ;D)
1/2 taza de yogur
1 taza de nueces picadas (no tenía, así que sustituí por un buen puñado de piñones; cuando lo repita, irá con nueces. Está claro que lo voy a repetir)

Este pastel fue parte de mi agobio del jueves... acabé la miel, la levadura, la canela, el jengibre rallado del congelador, las nueces, la melaza (bueno, es que cociné algo más), las placas de lasaña... pero es que había ido al supermercado el día anterior!!! Qué desastre... Menos mal que robé zanahorias a mi madre!

Glaseado

3/4 tarrina de queso estilo philadelphia
Ralladura de 1/2 naranja
Sirope de arce para mezclar


(vaina de cardamomo)

Preparación

Aparte de pelar y rallar un montón de zanahorias:

Calentar el horno, a 190ºC. Mezclar bien el aceite y la miel; ir añadiendo los huevos, incorporándolos bien, uno a uno. Por último, añadir el yogur y reservar.

Juntar la harina y los ingredientes secos (excepto la zanahoria, el jengibre y nueces - piñones). Mezclar con el mejunje anterior, con una espátula, sin batir mucho. Finalmente, añadir la zanahoria, jengibre y nueces, también con la espátula. Mezclar totalmente, pero no demasiado, para que quede esponjoso.

Verter en un molde (ojo, que es grande: mi molde de cake quedó justo al borde!) y al horno con él. Unos 15 minutos a 190ºC, después se baja la temperatura a 180ºC y dejar otros 30 minutos más. En total, aproximadamente, 45 minutos. Yo lo dejé los 45.

Sacar del horno, dejar enfriar un chisco y desmoldar.

Una vez frío, preparar la cobertura: en un bol, batir juntos la ralladura y el philadelphia. Ir añadiendo a los pocos sirope de arce, y batiendo bien. Tiene que quedar una consistencia espesa que permita extenderlo, y que guste de sabor (aquí, toca darle pruebas a la cuchara ;D).

Cubrir y dejar que endurezca algo. Al ser solo philadelphia (Arantza tiene también otra versión de glaseado más denso) casi no endurece, pero está muy bien. Ya lo había probado con un pudding de chocolate, hace un año, y estupendo!

Y ahora... a disfrutarlo! Con un café, y lluvia y frío, queda estupendo! Y bonito, que también importa!

Feliz semana a todos... y sigue noviembre!

El unicornio, llamado Martiño, cumplió un año
"Curiosa vida ésta, creo que no he crecido. Lo haré de San Martiño en San Martiño? O los peluches no crecen?" Es la magia del cuerno de unicornio, que todo duende persigue...

domingo, 7 de noviembre de 2010

Castañas: HEMC#48

hemc #48 - castañas

Buenas!!!!

Que hace que no participo en Hecho en mi cocina! (lo echaba de menos, la verdad). Este mes, hosted by Sara, la temática es ideal: CASTAÑAS. Sobre todo para mí, que no he tenido tiempo de hacerlas en almíbar ni casi de otra forma, hubo pocas por casa!

Pero el otro día sí compré unas cuantas, y aprovecharé para recetas... Hoy, y mi contribución al HEMC#48:

CREMA DE CALABAZA Y CASTAÑAS

Ingredientes

Para cocer las castañas
2 buenos puñados de castañas
Agua con sal
Un par de ramas de hinojo (fiuncho en mi tierra)

Para la crema
Las castañas cocidas y peladas
Puré de calabaza: unos 500 - 600 g
1 litro (aprox) de caldo de verduras
1 patata cocida (aprovechada del caldo)
Un chorro escaso de aceite
Sal y pimienta al gusto

Preparación

En primer lugar, cocer las castañas: en una olla con suficiente agua, poner a hervir añadiendo sal, las ramas de hinojo y finalmente, cuando borbotee el agua, las castañas. Tiempo? Entre 30 y 45 minutos; a partir de la media hora yo suelo ir pinchándolas hasta que veo que están consistentes pero se pinchan bien. Escurrir y reservar. Según enfríen, ir pelándolas.

Mientras, preparar un caldo de verduras. Yo aproveché lo que tenía por casa: una rama de apio, un puerro, un trozo de cebolla, un ajo, una zanahoria, un trozo de pimiento y una patata. En la olla a presión, con más de un litro de agua, sal y un chisco de aceite, unos 6 minutos. Reservar.


Por separado también, preparar el puré de calabaza. También en la olla a presión, puse la calabaza troceada y pelada con agua, unos 5-6 minutos según empieza a silbar. No le añadí nada, porque compré bastante calabaza y aprovecho el puré para congelar para hacer alguna tarta más adelante. Una vez cocida, escurrir el agua dejando una poca, para pasar por la batidora.

Unir los ingredientes: en una olla, poner unos 500-600 g del puré con el caldo de verduras. Yo lo añadí todo, pero en esto como en todo: al gusto! Para espesarlo, añadí la patata de la preparación del caldo. Por último, echar un buen puñado de castañas, dejando unas pocas troceadas aparte. Triturar todo con la batidora, añadir un chorrito de aceite, una pizca de sal y pimienta, y dejar que hierva, removiendo. Al borbotear, probé la crema para ajustar salazón. Bajar el fuego, un par de minutos para unir de todo sabores, y apagar.

Al servir, añadir por encima trocitos de castaña. Seguramente, se hundirán en la crema, pero como tropezones son geniales!


Queda una crema espesa, con una mezcla de sabores interesante, la verdad (el toque del hinojo se nota), y de color naranja amarronado, ya que pierde el brillo de la calabaza. Las cantidades son orientativas; me encantan este tipo de cremas de verduras, variadas o únicas en cuanto a ingredientes, pero reconozco que o sigo una receta al pie de la letra, o voy variando según lo que tenga en casa...

Bueno, una contribución modesta al HEMC#48, pero estupenda para reencontrarnos!!!



De mi falta de tiempo últimamente:
Miró su reflejo en el espejo: "Siento llegar tarde. Me entretuve por el camino".
El caso será llegar...

Un beso a todos!

lunes, 1 de noviembre de 2010

Chile con carne... de muerte!

Si hay una historia, debería haber comida...

El búnker estaba extrañamente silencioso... Apenas sí había una luz (acababa de encenderla) y hacía frío. Está claro que ya estábamos entrando en invierno. Lo que no entendía es dónde estaba todo el mundo - los que quedábamos - y si había llegado muy pronto. "¿Me fui a casa?", pensé. "Definitivamente, creo que paso demasiadas horas aquí dentro". Sé que a veces es difícil respirar fuera, pero estar en casa es relajante, creo, aunque no me acuerdo muy bien de por qué. Prefería sentirme a gusto y tranquila allí, sentada o caminando, pero viendo las paredes grises oscuras sin pintar, tan familiares y acogedoras.

Había algo raro que justificaba el tupper que llevaba. Conseguí calentarlo, en ese microondas cutre que me había agenciado hacía tiempo, y me senté, apoyando las piernas sobre otra banqueta. ¿Por qué no llegaba nadie? Era inquietante, silencioso y humeante... al menos el chile que empecé a comer. Y en una esquina volví a ver la araña de siempre, pateando mientras exploraba la que era ya su casa. ¿A las arañas no les afecta la radiación, no eran las cucarachas? Pero sólo tenemos arañas en el búnker, y no molestan.

Lo que sí molesta es esa maldita alarma; no era el micro, pensé, mientras seguí comiendo (caliente, picante, pero suave de textura...). Habrá pasado algo? Una fuga? Pero dónde se habrá metido todo el mundo...

HEMOS PASADO HALLOWEEN!!!! Y el año pasado tomé prestada esta pedazo receta de Arantza; triunfó en casa, y hubo que repetirla! Para pasar miedo, al menos mi estómago, que hoy se queja amenazante para el resto de la semana... Pero ha valido la pena! Ella puso que era chile letal, yo lo dejaré en mortal de necesidad...



CHILE CON CARNE

Ingredientes

500 g ternera picada
1 rama de apio picada
3 cebollas pequeñas picadas finas
10 dientes de ajo
1 lata grande de tomate troceado en conserva
5 cucharadas grandes de tomate triturado
200 g de alubias negras cocidas (las cocí con un ajo y un trozo de cebolla). En la receta original, una lata de frijoles negros en su jugo, pero yo era lo que tenía en casa...
3 chipotles en conserva + 2 cucharadas de su jugo (los chipotles, que desconocía, los encontré sin problemas en el supermercado)
1/2 chile rojo picado (vaaaale, yo puse 1/3; la vez anterior casi no lo puedo comer).
1/2 chile verde picado
2 cucharadas grandes de cacao en polvo, sin azúcar
2 cucharadas pequeñas de canela
2 cucharadas pequeñas de comino molido
pimienta negra, sal
cilantro fresco picado (o congelado ;D, como no siempre lo consigo lo tengo en el congelador, junto con albahaca fresca)
aceite de oliva

Preparación

Antes de todo yo cogería una buena cuchara de madera... La gracia de este chile es ir removiendo, en una cazuela alta, durante el proceso, y disfrutar la mezcla de olores! O sentirse bruja por un día y remover, remover...

En la cazuela echar un buen chorro de aceite de oliva; una vez caliente, añadir la cebolla, el ajo y el apio bien picados (con la batidora siempre se apura). Cuando estén blandos, casi hechos, añadir los chiles, los chipotles, el comino, la canela y mezclar bien. Añadir la carne, que se vaya dorando. Una vez dorada, echar el tomate troceado y triturado, remover, y por último, las alubias/frijoles, con el líquido en el que se coció, y el jugo de los chipotles.

Mezclar bien, salpimentar y añadir el cilantro (cuando más, mejor, siempre lo digo... me chifla el cilantro). A fuego fuerte, dejar que hierva y añadir el cacao. Mezclar bien y bajar el fuego; que borbotee, a fuego suave, entre 30 y 45 min (yo lo dejé los 45 minutos).

Arantza propone acompañarlo de nachos, guacamole y crema agria... En casa lo acompañamos con unas tortitas, suficiente. Sobre todo teniendo en cuenta la cantidad que nos zampamos...

Es un plato contundente, con mucho sabor, no demasiado especiado (siempre hay gente que le tiene miedo a las especias). El toque del cacao, impresionante: queda aciertopelado, digo, aterciopelado (la RAE y yo últimamente tenemos una relación estrecha). Vamos, para repetir de nuevo, y supongo que antes de un año!

Un bico a todos!