sábado, 4 de mayo de 2013

Galletas de plátano

Galletas de plátano!

Sigo por aquí, intentando añadir entradas... aunque sea por un registro digital de mis pruebas! Estaba convencida que las últimas habían sido dulces pero no, así que hoy vuelvo a orígenes perdidos: GALLETAS!
 
 Y es que tenía un montón (bueno, unos pocos) plátanos maduros en casa... Yo antes no solía tener plátanos a menudo, pero Martín los come bien, así que sieeeempre tengo plátanos! (bueno, excepto en mueslis, que aumentan niveles en sangre de plátano seco y pasas).
Además, entro en esa fase rara que nos da a los padres (o eso espero que no sea la única): en casa se come el plátano esté como esté de bonito, feo, o cantando sevillanas, pero como empiece a ponerse feo a la guardería de merienda NO LO MANDO NI DE BROMA! (esto aplica a cualquier fruta, yogur, calcetín o camiseta del niño). Por lo que cada 2 semanas o así me toca aprovechar algún plátano muy maduro...
Variaciones sobre el cake de chocolate y plátano (la mar de apetitoso) ya las he hecho, así que tocaba improvisar, y me fui a buscar una receta de galletas!

 
Y tras rebuscar por ahí, me convenció (cómo si no habiendo un gurú) la receta de El monstruo de las galletas! Que fue la que probé y por ahí tengo. A disfrutarla!

GALLETAS DE PLÁTANO Y AVENA (sobre 20 uds)

Ingredientes
120 g mantequilla
140 g azúcar moreno
200 g plátanos maduros (entre 2 y 4 según tamaño)
200 g harina
120 g avena en copos (yo la trituro para que quede fina)
1 huevo
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 pizca sal
Yna cucharada de levadura seca

Preparación

Unir bien la mantequilla y el azúcar (suelo meter el bol unos segundos al microondas para ayudar). Triturar los plátanos (con un tenedor) y añadir junto con el huevo a la mantequilla y azúcar. Echar toda la harina con la levadura (tamizada primero), mezclando bien. Por último añadir la sal y la vainilla. 
La mezcla queda blanda (sobre todo si como yo, que no tengo paciencia, os pasáis con el tiempo en el microondas para la mantequilla). Solución? Nevera, que enfríe la masa para que se pueda trabajar.

Yo la dejé una hora y media aproximadamente. Después fui montando bolas (con ayuda de cuchara y las manos con harina) y distribuyéndolas sobre las bandejas del horno (bien con papel de horno o bandejas de silicona, que son las que tengo). Se van deshaciendo un poco, pero si la masa está bien fría permite trabajarla. En la receta original utiliza film para dar forma de rollo y que no se deshagan.
 

Y al horno con ellas! 180º durante 10-15 minutos. Yo las hice grandes, y necesitaron los 15 minutos. Suele ser suficiente cuando los bordes empiezan a coger un color tostado. Se dejan enfriar unos minutos sobre la propia bandeja del horno (fuera del horno) antes de pasarlas a una rejilla para que enfríen totalmente.

 Son muy ricas! El toque de la avena es estupendo! La trituro por Martín, pero en copos enteros (aunque no absorben tanta humedad de la masa) debe darles un buen aire... Quedan esponjosas y suaves, así que a probar!