viernes, 22 de octubre de 2010

Miedo escénico: galletas...

Bueno, bueno, bueno... He vuelto! O eso espero, al menos. Llevo tiempo intentándolo, recetas pendientes, pensamientos recurrentes y cosas pasando a mi alrededor, pero con la falta de tiempo he ido alimentando ese miedo escénico a todo aquello que has dejado de hacer durante un largo período...

Peeeero, aquí estoy. Después de una pedazo comilona y larga sobremesa del trabajo, una charla con un colega del trabajo en la que me puse pesada-filosófica (a ver, dos copillas en la sobremesa cayeron), he vuelto a casa pensando en un montón de cosas. La hora de camino me ha sentado (junto con el resto del día, reconozco) bien. BIEN. Y me ha dado por pensar...

De aquí la entrada; espero que me lo permitáis, y si no, promesa
seria que mañana publico una entrada: las mejores cookies del mundo (por el monstruo de las galletas)! Así que, para receta, wait for tomorrow y dejad de leer... Que hoy me apetece pensar!


Últimamente hay muchas cosas: trabajo, máster, familia, vender piso y comprar otro (a quién se le ocurre en plena crisis, y lo que conlleva: bancos, cocinas, baños, tiempo, más tiempo), alguna cosa que se me olvida (debería dormir más de 5 horas algún día) y un par más que me dejo en la recámara, dentro de mi cabeza. Agobio, la verdad, pero creo que dentro de todo lo estamos llevando bien. Aunque llevo 2-3 semanas que no me centro y me desquicio. Y el miedo a lo que pueda pasar, ahí sigiloso, esperando a que te despistes. Pero el inglés es estupendo, y me dedico a dejarme mensajes en el trabajo y en casa:

- Breath (y deja de mirar el calendario)
- P'alante y con lógica
- On the way...
- Take it as it comes (ésta es de hoy, me gusta!)

Funciona, de verdad! O al menos me lo creo...






Me queda poco para los 30, y soy una persona impaciente... Voy cogiendo confianza con cosillas, viéndome ya mayor y confiada para otras, pero hoy he vuelto a acordarme de toooodo lo que me queda por aprender y lo poco que sé. Y que bueno, me sigo encontrando a mí ahí: siempre dudando, pero queriendo tirar por un lado y luchando por conseguirlo. Impresionante, me estaba olvidando!!!! Y sí, a veces toca esperar y mirar alrededor...

El ruido que se genera con tanta cosa a veces no deja pensar con claridad. Me di cuenta de que estaba tendiendo a uno de mis fallos: encontrarme sola (me dirás: marido, familia, amigos geniales), todo por tanto agobio, y a buscar una libertad traducida en ir a mi ritmo yo sola (tontería suma, lo sé).

Así que ver, disfrutar, aprender... de todo y de todos. Y calma, mucha calma para hacer cosas y ver el bosque. Hace dos años no sabía qué hacer de mi vida: tesis acabada, salir de la universidad y ver el mundo... me fui a empresa (o centro tecnológico, vamos) y bueno! La crisis ahora pega: compañeros despedidos, otros desplazados del departamento y yo que sé que no me puedo preocupar. Menuda semaniña por allá, pena, rabia y qué se yo... y creo que hasta hoy no me acordé de la suerte que tengo, con mis cosas y la gente que me rodea. Abuff! Mi cabeciña...

Así que, recordándome en mis mejores tiempos, y aprovechando este blog: cabeza alta, sonrisa (la vida lo merece, la gente también), y Lucía, acuérdate de qué quieres hacer y hazlo bien...

Mientras? (me refiero a estas semanas). GALLETAS!!!! En el chollo me han dicho que cuando me enfado al día siguiente llevo galletas (y sí, si tengo tiempo, y no sólo por esto). Lo ves? Vale un mundo que alguien te conozca y te diga esto con cariño... Y que en casa Javier me deje hacer todas las hornadas que quiera, así sean las 12 de la noche y haya que levantarse a las 5.30 al día siguiente...

Nos mudaremos (a Porriño, gente, ese sitio curiosamente SÍ vale la pena), y no tendré 2 horas de coche al día. Se empezará una nueva vida, o eso espero, y lo que cueste se superará. Y que aunque alguna gente desaparecerá (como hasta ahora), la huella queda ahí, y es ley de vida. Pero tendré que coger ese 407 algún día para pensar, dar vueltas a la cabeza, y recordar que detrás de todo tengo un fin... y un montón de condiciones de contorno para conseguirlo y disfrutarlo.

Un beso!!!! Y perdonad por la ida de olla...

Lucía.

pd. Mañana, GALLETAS!

3 comentarios:

Esperanza dijo...

Hola Lucía: cuánto tiempo sin saber de ti. Yo estoy prácticamente desaparecida del blog. He empezado a trabajar de nuevo después de 7 años de vida casera. Es un alivio y un agobio a la vez, sin tiempo para nada. Sigo visitando los blogs de los demás, como el tuyo.
Veo que tienes la cabeza dando vueltas. Y que te das ánimos y calma a ti misma. Parece un torbellino, todas las ideas que sueltas a la vez.
Me recuerdas a mí misma.
Yo tengo algunos años más que tú (alrededor de una década), y sigo igual.
Envidio a las personas equilibradas que lo tienen todo muy claro. Yo a estas alturas aún no sé lo que quiero ni si lo que hago está bien, como ha quedado claro en algunas entradas de mi blog. Pero hay que seguir. Y si algo tengo claro es el valor de las personas que me rodean, vivir intensamente cada momento y tener claro lo que es importante y al diablo lo demás, que ya saldrá.
Espero que todo te salga bien y adelante.
No sé si leer la receta de las galletas, porque me van a apetecer, seguro.
Muchos besos.
Esperanza.

Lucía dijo...

Hola, Esperanza!

Gracias por la visita... Sí, ha costado volver, espero verte por ahí!
Es curioso ver como este estado de desazón se repite alrededor... hay que saber esperar y aprender, seguir aprendiendo! Ánimo con el trabajo - tiene que estar siendo duro, el tiempo, las peques y lo demás... Nos toca vivir; me ha encantado leerte, de verdad, y muchos ánimos, sabes?

Mientras, seguiremos cocinando todos juntos, por estos blogs de dios ;D. Un beso muy fuerte y gracias!

Ruben dijo...

Bueno, tranquila y ánimos... ya verás que después de la mudanza y evitar el largo trayecto de coche diario te dejará tiempo para preparar otras cosas, como por ejemplo esas magníficas galletas ;-)